martes, 16 de noviembre de 2010

Beat MacC : ¿qué lo hace tan diferente, tan atractivo?

Ha transcurrido casi una semana desde el desembarco del Up and Coming Tour de Paul Mc Cartney en el estadio de River Plate y aún impregnado por la avasallante intensidad afectiva que esta experiencia supuso, creo oportuno poner de relieve algunos aspectos de su trayectoria no exentos de una significativa dimensión paradojal

Tratándose de un mito viviente, la tendencia a marginar o esquematizar la importancia de los contextos que hicieron y hacen a las condiciones de posibilidad de su producción artística se traduce en el culto a la nociva figura del genio, categoría perimida desde hace tiempo pero útil aún a los medios de comunicación masivos y a los fans desaforados
Es posible intentar alumbrar parte de estas condiciones desde el presente: quienes estuvimos en River tuvimos la oportunidad de disfrutar de dos temas (Sing the Changes y Highway) que componen el álbum Electric Arguments del año 2008. Dicho álbum pertenece a The Fireman, una suerte de alter ego o banda paralela de música electrónica que Mc Cartney creó en 1993, casi en el anonimato junto con Youth, ex integrante de Killing Joke y productor de una gran cantidad de trabajos de importantes bandas y solistas contemporáneos como U2, Beth Orton o Marilyn Manson. La estrategia que adoptó Mc Cartney para emprender caminos más decididamente experimentales no es nueva, ya tiene un importante antecedente en 1967 con Sgt. Pepper Lonely Hearts Club Band donde los integrantes de The Beatles, además de ironizar sobre sí mismos se arriesgaron a dar el paso definitivo hacia nuevos sonidos y concepciones artísticas

El título Electric Arguments surge de un poema de Allen Ginsberg y el arte de tapa es del propio ex beatle. En las letras de las canciones juega con la técnica del Cut up, innovación que agradecemos a William Burroughs y a Brion Gysin y cuya expresión más reconocida es la novela El almuerzo desnudo.   
La relación de Mc Cartney con los poetas beats y con las artes plásticas tampoco es novedosa. Hacia 1965 Paul financió la Indica Gallery, librería y galería de arte que manejaban su entonces cuñado, Peter Asher, el artista John Dunbar y su posterior biografo, Barry Miles. La Indica Gallery fue el espacio en donde John Lennon y Yoko Ono se conocieron, en donde John tomó contacto con La experiencia psicodélica de Timothy Leary y desconectó su mente para dejarse llevar y pergeñar junto a su socio (te aviso, no te pierdas el siguiente enlace:) Tomorrow Never Knows (no podés no escucharla acá) y sobre todo fue un centro de divulgación de nuevas ideas y tendencias en aquella estimulante Swinging London que también contaría con el aporte argentino de Julio Le Parc 

Allí Barry Miles inició a Mc Cartney en la lectura de la Beat Generation pero el vínculo del músico con Ginsberg se materializaría en su forma más visible en el Royal Albert Hall durante octubre de 1995 con la presentación de The Ballad of Skeletons, trabajo en el cual también habían colaborado el compositor minimalista Philip Glass y el guitarrista del Patti Smith Group Lenny Kaye.
William Burroughs formaría parte gracias a Paul del seleccionado de celebridades de la memorable obra de arte que significó la cubierta del Sgt Pepper, diseñada por uno de los artistas más representativos del Pop Art en Gran Bretaña: Peter Blake. El otro es Richard Hamilton a quien la historiografía le atribuye nada menos que su Big Bang con el collage de 1956: Pero ¿qué es lo que hace a los hogares de hoy tan diferentes y atractivos?    
La cubierta del Sgt Pepper es un verdadero manifiesto, de ella es posible extraer conexiones que develan no sólo gustos particulares sino influencias que permiten comprender algunas de las razones que sustentaron la magnitud del fenómeno cultural que significó el cuarteto y cuya resonancia todavía está lejos de extinguirse.


Mc Cartney y Blake se reencontrarían en el año 2000. El resultado fue el Liverpool Sound Collage, un álbum de música electrónica creado para una exhibición de Blake en la galería Tate de dicha ciudad en el cual también colaborarían el mencionado Youth y los Super Furry Animals

La relación con los artistas plásticos no se agota allí, en los 90´ el propio Mc Cartney daría a conocer sus pinturas. En ellas pueden detectarse rasgos del Expresionismo abstracto que según sus propias palabras se deben a su amistad con Willem de Kooning.   
Los enlaces que se pueden seguir realizando para reconstruir las constelaciones que no tan  explícitamente se aluden cuando se habla de la obra producida en las últimas cinco décadas por Paul Mc Cartney no se agotan fácilmente, podría continuar citándolas pero me detengo aquí, ahora los invito a relajarse y disfrutar una típica dulce balada del viejo Macca. (clic acá)